Reseña: Ya no recuerdo qué quería ser de mayor, varios autores

¡Cuervos días! Hoy os vengo a presentar un libro refrescante cuyos autores son jóvenes, talentosos, y a menudo juzgados como si pertenecieran a una generación que no tiene nada nuevo que contar. Por querer salirse de la jaula y dibujar una senda diferente. Ésta antología aúna las (necesarias) voces de nueve autores en ocho relatos.

"¿Qué querías ser de mayor? ¿Te acuerdas? Sea cual sea la respuesta, lo que seguramente recuerdes de aquella época es que la vida se parecía bastante a un camino bien delimitado. A una sucesión de certezas que alguien había colocado enfrente de ti: sólo tenías que moverte de casilla en casilla y esperar a crecer.
Esa sensación se desvaneció hace tiempo, ¿verdad? Pues bien, de eso habla este libro.

Los nueve integrantes de esta antología de cuentos convierten en relatos muy distintos un mismo momento de sus vidas. Esa primera adultez que disuelve referentes, pone en tela de juicio todo lo aprendido y llena el cuerpo de indecisiones y dudas. Un estado que nos acompaña durante del resto de nuestros días. Y, ante todo, una excusa importante para presentar al futuro de la narrativa española."

El libro arranca con una introducción de los editores muy acertada: Nos explican por qué una higuera en la portada (Es la imagen que usa Sylvia Plath en "la campana de cristal" ante la indecisión, la burificación de caminos en la vida) y una debida presentación hacia estos autores, a menudo llamados millenials, como si así pudieran englobarlos en un todo, como si sus historias (y las nuestras) no fueran importantes. Juzgar sin conocer siempre es síntoma de ignorancia, tanto en el mundo real... como en literatura.

Hay un momento en la vida en que todos nuestros pasos dejan de estar marcados y tenemos que escoger. Elegir un camino, un destino, una parcela en el mundo. De esa premisa nacen éstos relatos, aunque son muy diferentes entre sí. Los apunto brevemente:

1. FANTASMA, de María Bastarós: Habla del paso del tiempo y la nostalgia a través de encuentros inesperados, de esos que todos hemos vivido alguna vez e irremediablemente hacen aflorar demonios (y fantasmas) que creíamos haber dejado atrás.

2. ESTOY BIEN, GRACIAS, de Andrea Gumes: Protagonizado por Carlota y sus múltiples problemas, partiendo de la casi perfecta de su amiga Inés, su creciente obsesión por las plantas, la adicción por los ansiolíticos como vía de escape... y una madre siempre a punto para decir lo último que la apetece oír. Y luego están esas malditas paredes amarillas que no aportan nada bueno a su vida. Divertida e ingeniosa.

3. UN ENORME OJO AMARILLO, de Munir Hachemi: Partiendo de un viaje alucinógeno conocemos a M, una chica que no podría acumular más problemas o estar más aislada, casi invisible, oculta, hundiéndose lentamente sin apenas poder permancer en la vida de las personas que más la importan.

4. UN ATAQUE DE ANGUSTIA MOMENTÁNEA, de Elisa Levi: Desde largas noches sin poder dormir a días de vigilia en los que se amontonan los recuerdos. A medio camino entre Nottingham y Londres, con cameos de Olivia Colman y Rose Mcgowan. Y te sientes perdida, nada tiene sentido, todo te abruma. Imagínatelo. ¿Qué harías?

5. IMPERIO, de Víctor Parkas: Atracar con tu hija en brazos... eso sí que es un deporte de riesgo. Vender los móviles robados para una "granja de clics" o intentar que ella, Imperio, se mantenga en un anonimato analógico son solo algunas de las desventuras que te encuentras cuando la sociedad te da la espalda.

6.TE QUIERO, PERO, de Alejandra Martínez de Miguel: Un grupo de amigas y una relación de pareja cuyas normas no parecen del todo claras. ¿Es que ya no se quieren? ¿O simplemente buscan cosas diferentes?

7.EL OJEO, de Lucía Baskaran: La relación de Enrique y Aidan aún cuenta con algunas preguntas sin respuesta. Cuando Enrique regresa a Madrid vuelve a entrar en contacto con su familia, sus costumbres, esa forma de vivir tan diferente... y Javi. Todo lo que podría hacerle añorar su vida en Londres o huir para siempre.

8.EL FIN DEL MUNDO, Luna Miguel y Antonio J.Rodríguez: Habitación 279. Olores, conversaciones, historias aún por descubrir. La diferencia de edad nunca fue un problema entre Amanda y Mandy, y tampoco lo mucho que viajan por culpa de sus profesiones. Los celos podrían serlo. La añoranza. La distancia. La intensidad de sus reencuentros.

Como suele ocurrir con las antologías, son historias breves, sin demasiado desarrollo aunque no por ello carentes de complejidad. Y sí, está claro que unas me han gustado más que otras, pero en su conjunto funcionan bastante bien. Mas allá del contenido es un libro perfecto para diferenciar los estilos de cada narrador y, quién sabe, tal vez descubrir un nuevo autor o autora que nos fascine y cuyos libros corramos a devorar.

Hay quienes ven estas (nuevas) voces como una amenaza, quizá por tener otra mentalidad, por levantarse y contar sus historias sin que nadie pueda silenciarlas. Porque cada generación ha tenido que pasar por unas circunstancias propias que, nos guste o no, también se impregnan en nuestro carácter y nuestras preocupaciones. Cambian las inquietudes, pero autores buenos y malos los ha habido siempre, unos luchando por hacerse ver, otros con cientos de seguidores a sus espaldas sin que una cosa u otra determine la validez de su lírica. Creo que son muchos los estilos, los sueños. Todos hemos pasado por esa etapa de nuestras vidas en la que todo son preguntas, en la que la angustia por un exceso de futuro nos ahoga. Y vosotros, ¿Recordáis lo que queríais ser de mayores?

Una lectura breve e intensa con muchos estilos y nombres propios que merecen hacerse un hueco en nuestras estanterías.