¡Cuervos días!
Si os gusta la mitología y sobre todo el análisis de los mensajes indirectos que se esconden en muchas de sus historias, os traigo un libro que sin duda os va a apasionar. Y si además disfrutáis redescubriendo la figura de la mujer a lo largo de los tiempos, mucho mejor.

"Las arpías. Medusa. Las esfinges. Circe. La mitología de todas las civilizaciones está llena de monstruos representados bajo forma femenina: son mujeres que no respetan los límites, enfadadas, codiciosas, abiertamente sexuales. Fueron concebidas como engendros deformes, horripilantes, para con el paso del tiempo atribuirles una belleza e inteligencia sibilinas. Su pecado es poner en jaque el valor y la fortaleza masculinas, desafiar a los grandes héroes, amenazar la historia. En este ensayo que combina la crítica histórica y literaria con el manifiesto político y las memorias, Jess Zimmerman nos ofrece un repaso lúcido y combativo por esas grandes fealdades atribuidas a las mujeres desde el inicio de los tiempos, representadas en once monstruos legendarios. Porque, tal vez, aquello que nos hace peligrosas, o poco deseables, es en realidad nuestra mayor fortaleza."

Jess Zimmerman utiliza un formato autobiográfico para encadenar sus vivencias personales a un análisis de algunas de las figuras femeninas más conocidas y temidas de la mitología. ¿Temidas por su poder? No, impensable. Es por ello que habitualmente eran representadas como monstruosas criaturas a las que se había intentado despojar de todo lo que las hiciera destacar. Pero al final, incluso tras esa máscara, nada ni nadie ha podido diezmar su valor.

Partiendo de esos años de adolescencia en los que cualquier chica se mira al espejo y no se gusta (tienes granos, cambios en tu cuerpo, una nariz demasiado afilada...) es normal que la autora sintiera simpatía por los monstruos de la mitología con los que, en días flojos, se sentía identificada. Pero con un estudio sobre sus historias nos damos cuenta que éstas mujeres en su mayoría no eran ni monstruosas ni villanas, tal vez fueron los años quienes nos las vendieron como tal. Ellas fueron convertidas en algo despreciable por ser incomprendidas, atacadas, violadas y desterradas. Y es así como éste libro se adentra en hacernos conocer a once monstruosas criaturas de las que seguramente hemos oído hablar.

Las sirenas, diréis, no son tan monstruosas. Pero hay que recordar que su canto hundía barcos y llevaba marineros a la locura. Que la palabra "Arpía" se usa hoy en día como insulto. En los casos de Medusa y Escila, resulta aún más doloroso descubrir que su transformación se debió a los celos de otras mujeres. ¿No estáis hartas de relatos donde se nos enfrenta por conseguir la atención de un hombre? Y lo que es peor, la que no es deseada debe ser transformada en una criatura temible y despreciada por los demás.

Pero el verdadero valor de éste ensayo es la forma en la que nos enseña que todo lo que se atribuyó a estas mujeres para hacerlas "monstruosas" era en realidad lo que las hacía fuertes, únicas, capaces de obrar proezas que nadie tenía a su alcance. Curioso que Atenea transformara en monstruo a Medusa pero, después de que ésta fuera decapitada por Perseo (no me acuséis de spoiler) decidiera llevar su imagen en su escudo para esgrimirla como señal de fuerza e intimidación contra sus enemigos.

El lenguaje es muy sencillo, hasta divertido, plagado de alusiones culturales que harán las delicias de los que somos voraces coleccionistas de anécdotas y relatos. Os fascinará cuántas referencias tiene nuestro presente a esas criaturas y los significados que se ha intentado dar a su imagen. Y en su mayoría, como medio de control y supresión de la mujer en su individualidad.

Cuántas veces tendremos que tolerar que la historia se repita. Que nos enfrenten, que nos oculten y silencien. Que se nos exija el doble por conseguir estar en el sitio que nos corresponde. 

Y una de mis frases favoritas en el libro, plantando cara a la oxidada idea de que las mujeres tenían como fin máximo el de traer vida: Nuestro cuerpo puede dar a luz a todos y cada uno de los temores más profundos para el hombre.







¡Cuervos días!
Para finalizar el año siento que no hay mejor lectura que un poco de romance, con sus toques de drama, personajes que enganchen y una trama ágil en medio de estos días tan caóticos. ¡Lo tengo, lo tengo! Traigo la novela perfecta.

"Una historia de amor fascinante sobre una mujer que, inesperadamente, se ve obligada a elegir entre su marido, a quien daba por fallecido, y el prometido que años después le ha devuelto la ilusión por vivir. Con poco más de veinte años, Emma Blair se casa con su amor de juventud, Jesse. Juntos construyen una vida a su medida, alejada de las expectativas de sus familias y entorno más cercano. Recorren el mundo, Emma como escritora freelance y Jesse como ayudante de producción de documentales sobre naturaleza, exprimiendo la vida al máximo y aprovechando cada oportunidad que se les presenta de vivir aventuras. En su primer aniversario de bodas, Jesse recibe el encargo de ir a trabajar a las Islas Aleutianas. Y mientras sobrevuela el Pacífico, su helicóptero desaparece. Así, sin más, Jesse se va para siempre. Emma deja su trabajo y regresa a su hogar en un esfuerzo por recomponer su vida. Años después, cuando ya ha cumplido los treinta, se reencuentra con Sam, un viejo amigo, y vuelve a enamorarse. Cuando Emma y Sam se comprometen, parece que la vida le está brindando una nueva oportunidad en el amor. Pero entonces encuentran a Jesse. Está vivo, y lleva años intentando volver a casa. Emma tiene ahora un marido y un prometido, ¿pero quién de ellos es su verdadero amor? ¿Qué significa en realidad amar de verdad? Emma sabe que debe escuchar a su corazón. Es solo que no está segura de qué le está diciendo."

Emma está prometida, por fin su vida parece volver a sonreírle... hasta que descubre que su marido nunca murió, y que por tanto nunca enviudó. ¡Y él está de camino! ¿Cómo explicar que se ha prometido con otro? Y sobre todo, ¿Cómo descubrir a cuál de los dos pertenece ahora su corazón?

Jesse es tan aventurero e intrépido como ella, han recorrido medio mundo e inventado nuevas normas. Pero Sam es el joven que conoció en su juventud y siempre estuvo loco por ella, al que no dio una oportunidad solo por intentar parecerse a su hermana mayor. ¿Y si nunca se ha permitido ser ella misma? ¿Y si Sam es su alma gemela? ¿O puede serlo también Jesse, y que ellos sean los dos amores de su vida?

Taylor Jenkins Reid es experta en novelas deliciosas que enganchan y personajes que enamoran. Lo ha hecho con "Todos quieren a Daisy Jones" y la afamada "Los siete maridos de Evelyn Hugo". Es tal su éxito que ambas son ya adaptaciones cinematográficas confirmadas, una ya emitida y la otra en proceso.

En este caso nos encontramos una historia con el mismo potencial donde además nos enfrentaremos al mismo dilema que su protagonista: ¿Prefieres a Jesse, o a Sam?

Viajaremos por el tiempo desde su primer encuentro, a su primer matrimonio, y finalmente al presente para terminar de resolver el rompecabezas. Bastante parca en descripciones, con muchos diálogos y una trama que no pierde ritmo, es de esas novelas que se leen del tirón y nos engancha en cada momento de lectura. Ideal para pequeños descansos o en un bloqueo lector donde nuestra cabeza exige pocas distracciones.

Puedes hacer lo que quieras. Eso es lo que significa ser libre.

Me ha encantado la forma en que la novela aborda la identidad de Emma, cómo al descubrir que su marido sigue vivo se enfrenta a una realidad mucho peor que dudar de a cuál de los dos ama. ¿Y si nunca ha sabido quién es ella misma? El lugar donde se permite ser natural y libre, la persona que la acerca a su mejor versión. Así, el amor propio se vuelve un componente real y muy interesante para descubrir qué futuro debe escoger nuestra protagonista. La elección no es un hombre, es abrazarse a lo que lleva toda una vida queriendo ser.

Pero debo reconocer que los dos personajes masculinos también son magistrales, no hay un villano y un héroe, no se perfila a ninguno como la elección perfecta para allanar el camino. Porque en la vida y el amor nunca existen esas facilidades, todo es complicado y pedregoso, tanto como saber que vas a romper el corazón a una de las personas que más quieres.

Si le tengo que poner una pega, es que de algún modo acerté a adivinar cómo iban a ser las cosas. Me gusta, porque es coherente y muy justo con la historia y sus personajes. Pero quienes estéis familiarizados con mis reseñas sabéis que adelantarme al final no me gusta. Aún así, no empobreció mi experiencia como lectora.

"Los dos amores de mi vida" es una historia para soñadores y para almas perdidas que buscan respuestas, que anhelan encontrar su lugar y descubrir quiénes son. Es una historia de las que vale la pena leer.








¡Cuervos días!
Poneos el cinturón porque se viene un viaje lleno de curvas, tiros, traiciones y un poquito de amor. Quién le diría a Polly que su vida iba a cambiar tanto, que tendría que aprender deprisa si quería sobrevivir en un mundo que ha dejado de ser seguro.

"A punto de salir de prisión, Nate McClusky comete un grave error y su familia y él son condenados a muerte. Así lo sentencia Craig el Loco, líder de la mafia blanca Acero Ario, desde la celda de máxima seguridad donde cumple cadena perpetua. Un decreto ineludible, pues todo nazi supremacista de California responde al Acero, que compite contra los cárteles mexicanos por el control del narcotráfico en el Estado.

Unas horas después de ser puesto en libertad, Nate roba un coche y, por primera vez en su vida, va a buscar a su hija al colegio. Aunque Polly McClusky todavía no lo sabe, a su madre ya la han asesinado y su padre viene para ponerla a salvo. A sus once años, Polly es tímida, de inteligencia vivaz, y apenas conoce a Nate, pero juntos se lanzan a la carretera por una California desértica y llena de moteles y lugares inadecuados. Polly deberá madurar a toda prisa si quiere sobrevivir y salvarle la vida a su padre.

El aclamado debut literario de Jordan Harper combina un vertiginoso ritmo cinematográfico, digno de Tarantino o los hermanos Coen, con personajes inolvidables que crecen y luchan, atrapados en las redes de un mundo brutal en el que las lealtades se firman con sangre."

Sin tregua ni descripciones que lastren la continuidad de cada asalto, Jordan Harper nos trae una primera novela a la que no le falta un solo ingrediente para hacernos disfrutar.

Polly solo tiene once años y es más retraída e infantil de lo que cabe esperar en una chica de su edad. Pero es inocente, intenta llevar una vida tan ordinaria como la de cualquier otra... hasta que su padre, una figura ausente, se presenta en su colegio y se la lleva consigo a vida o muerte.

Aunque pueda parecer un thriller o una novela negra, mas bien nos encontramos ante un western contemporáneo tan ágil y visceral que bien podría tratarse de una película. Polly es la pieza clave, aporta frescura e inocencia, somos testigos de sus pensamientos y cómo trata de adaptarse a la situación que se le ha sobrevenido: Está sola, viajando con un padre ex convicto al que persigue toda una mafia que ha jurado acabar con ellos. 

Una trama muy ágil nos entremezcla escenas de violencia con vivencias familiares, el carácter tosco de un criminal con la inocencia aún sin corromper de su hija. Todo el entorno es muy hollywoodiense, pero a la vez recuerda a las novelas de forajidos y mafiosos.

Seremos testigos de la madurez de Polly de la forma más abrupta y temeraria posible: Veremos cómo su mirada de niña analiza todo el dolor en su entorno, cómo canaliza esas sensaciones nuevas para convertirse en una mujer capaz de sobrevivir a lo inimaginable. 

Los capítulos se definen por el personaje que los protagoniza. Así, vamos siguiendo los pasos de Polly, su padre Nate y parte del elenco para complementar su viaje. Me ha parecido una técnica muy eficaz, nos ayuda a viajar entre distintos espacios y conocer las motivaciones de todos sus protagonistas sin divagar con largas presentaciones e innecesarias escenas. Va directo a la acción, sabe desarrollarse sin dar aspecto apresurado y al mismo tiempo no nos distrae con elementos que no aporten nada. Y esto, en una novela de éste género, resulta fascinante. Porque cada vez que abres el libro te transportas al lugar donde lo dejaste y huyes de tu realidad sin ningún esfuerzo.

Si buscáis una lectura amena repleta de acción, capítulos cortos, lazos conmovedores, la suficiente violencia para hacerla trepidante y la dosis perfecta de intriga, no podéis perderos "La educación de Polly McClusky". Es imposible que os deje indiferentes.






¡Cuervos días!
No me da miedo reconocer que os traigo la reseña de una de mis autoras favoritas, una que siempre me deja con el corazón en un puño y que sabe tejer historias adictivas y novedosas en un género más que explotado. Se ha hecho larga la espera, pero Teresa Battaglia ha vuelto.

"Un asesino en serie, detenido por la comisaria Battaglia hace veintisiete años, consigue escapar del módulo de alta seguridad de la cárcel en la que está preso. Sin embargo, tras diez días de fuga, él mismo se vuelve a entregar a la policía porque teme ser el blanco de otro peligroso criminal que quiere reproducir los antiguos y macabros escenarios de sus asesinatos. Para desvelar nuevos detalles sobre sus crímenes e información sobre su misterioso imitador, solo está dispuesto a hablar con Teresa Battaglia. Teresa debe interpretar las enigmáticas pistas que este deja tras de sí: unas refinadas piezas de mosaicos que construye con trozos de huesos humanos, al tiempo que intenta reconectar con la persona que fue hace casi tres décadas, aquella mujer brillante, atrapada en una turbulenta relación conyugal, que se convirtió en una pionera cazadora de asesinos en serie y en la primera especialista en perfiles criminales de la policía italiana."

Nadie se explica que Giacomo Mainardi haya decidido volver a prisión tras su exitosa fuga. O el asesino en serie está realmente aterrado por lo que ha visto fuera, o nos encontramos ante un caso que va a jugar no solo con la mente de nuestros protagonistas: También con la del lector.

Tras los acontecimientos de "La virgen negra", Ilaria Tuti nos devuelve a su carismática comisaria Battaglia en el que sin duda va a ser su caso mas personal hasta la fecha. Y como siempre me gusta apuntar: Son novelas independientes que se pueden disfrutar por separado, pero si respetas el orden de la saga la experiencia de lectura es mucho mejor ya que acompañas a sus personajes y tienes la bonita oportunidad de disfrutar y sufrir con ellos.

Si no has leído los dos libros anteriores no te preocupes. La siguiente reseña no contiene spoilers.

Teresa sigue acumulando preocupaciones y secretos que tarde o temprano podrían resquebrajar la sólida relación que tiene con los miembros de su equipo. Por si fuera poco, ahora, una sombra de su pasado ha decidido reaparecer para terminar de abrir el suelo bajo sus pies. Ella fue quien ayudó a detener a Giacomo, por quien siente una empatía que pocos logran comprender. ¿Cómo puede una comisaria tener unos lazos emocionales tan íntimos con un asesino?

Marini, Parri, Blanca y todo el equipo tendrán que ponerse manos a la obra si quieren ser más listos que la persona a quien buscan, y aquel que parece atormentar los recuerdos de Teresa. Porque cuando el pasado acude en tu busca, es necesario removerlo y sacar historias olvidadas, frágiles y dolorosas, en las que podrían estar las respuestas a los crímenes que ahora deben perseguir.

Una vez más tenemos una novela ágil, cargada de símbolos y que mezcla varios hilos temporales sin alejarse en ningún momento del argumento central. Nos sumergiremos en el pasado de Teresa, sus primeros años trabajando para el insufrible Albert Lona, las batallas personales que tuvo que sobrevivir y su conexión con Giacomo, un vínculo que parece intacto veintisiete años después.

Como siempre, la mitología y cultura clásica tienen un papel relevante en la trama y los asesinatos. Todo aporta una capa de misterio, de incógnitas que los personajes van poco a poco desgranando y conectando con el argumento. Es algo que me fascina de esta saga, lo mística que consigue ser, cómo alumbra hasta el escenario más sangriento con leyendas y mensajes ocultos.

Otra de mis grandes debilidades es la relación de Teresa con Marini, el tándem profesional que forman y la fragilidad que se dibuja cuando muestran simpatía el uno por el otro. Pero ningún personaje decae. Tenemos una amplia variedad de personalidades, historias que deslumbran por sí solas y merecen su debido espacio. Hablo de Blanca, de Parri. Y el gran acierto que supone tener un villano carismático y seductor que logra cierta simpatía en el lector pese a sus imperdonables actos.

La primera novela de la saga, "Flores sobre el infierno", ha sido adaptada por la televisión italiana en una exitosa serie que, aunque no tiene anunciada su continuación, hará las delicias de los lectores.

Teresa Battaglia vuelve a dar un golpe sobre la mesa con un vertiginoso caso que marcará un punto de no retorno en sus muchas luchas. Porque hay enemigos aún más terribles que los criminales a los que da caza. Los que no cobran forma física.