¿Quieres escribir? III: Los 7 consejos de Frida Kahlo

En las lecciones anteriores recopilé consejos de dos grandes autores, pero...¿Quién dice que sólo un escritor nos puede enseñar a escribir? La inspiración se encuentra esperándonos en cualquier parte, sería un error no alimentarla de la sabiduría de otros artistas.
Frida Kahlo es una de  esas artistas famosas no sólo por su estilo pictórico, sino también por cómo veía e inmortalizaba la vida. Sin ir más lejos, nada más divorciarse pintó un autorretrato suyo donde se la veía vestida de hombre y con sus cabellos recién cortados, pues al parecer su marido creía que su melena la hacía lucir hermosa. De ésta forma, la artista empezaba a reivindicar su necesidad de libertad e independencia, la de ser juzgada y valorada de igual manera que a los hombres.
Pero mas allá de la figura, buscamos centrarnos en los mensajes que supo transmitir y de los que podemos aprender mucho a la hora de escribir (Y vivir). Aquí van los 7 consejos de Frida:

1. Ámate a ti mismo
   No pierdas tu esencia, no intentes seguir un camino que no sientes como tuyo. "La única cosa que sé, es que pinto porque lo necesito." Da igual cuáles sean las barreras o lo mucho que nos cueste dedicarnos a lo que nos gusta. Si te mueve por dentro, no dejes que nadie te haga renunciar en tu empeño por escribir. Es lo que eres.
   
2. Aprende cuándo hay que rendirse
   Como hizo ella tras las sucesivas infidelidades de su marido. Pero ésto no fue un final, tan solo el momento en el que supo que debía acabar un capítulo de su vida para poder empezar uno nuevo. A veces es precisamente lo que nos mata lo que nos hace fuertes, o en palabras de Frida "No estaba enferma, estoy rota".
   
3. El sufrimiento es el disfraz de la sabiduría
   A veces la gente que peor lo pasa es la que más inspiración encuentra para plasmar su arte. Frida lo hacía pintando, pero la escritura requiere de la misma pasión autodestructiva. Suelen ser nuestras desgracias, nuestros tormentos, los momentos que nos marcan, los primeros que nos apetece sacarnos del pecho y plasmar de alguna forma. Puede que incluso nos ayuden a desarrollarnos como personas sin darnos cuenta. "Bebo para ahogar mis dolores, pero los muy malditos han aprendido a nadar".
   
4. No te avergüences
   Si alguien sabe algo de marcar tendencias y romper con lo establecido, esa es Frida. Su estilo era peculiar y desde luego muy llamativo, pero también una de las cosas que la hizo destacar y por la que hoy en día se la recuerda. Tener un estilo no es más que una forma de expresar quién eres, sin pretensiones. Aprende de tus autores favoritos pero mantente fiel a tu esencia.
   
5. No te estanques ni te acomodes
   Porque todo cambia y la vida puede dar muchas vueltas, así que nunca lo des todo por sentado ni te cierres puertas. En nuestro caso es sabido que el oficio de escritor es duro y muchas veces frustrante, pero si lo sabes combinar con tu estilo de vida no tiene por qué acabar desesperándote. Quién sabe, incluso puede que encuentres algo más que te apasione y por lo que merezca la pena esforzarse.
   
6. Escritura como terapia
   Para Frida, tener un diario era una medicina para el alma. Está bien poder plasmar nuestros sentimientos o preocupaciones por escrito, incluso con dibujos. No solo nos ayudará a recopilar ideas para futuros textos, también sirve como un buen desahogo de todo lo que nos preocupa y una importante consulta en el futuro. ¿Nunca has pensado el bien que podría hacerte leer cómo te sentías en un futuro? Nadie te conoce mejor que tú.
   
7. Déjalo marchar
   Por muchas tormentas que asolaran su vida, Frida siempre mantuvo un espíritu alegre y luchador. Su arte era su salida de todo lo que la dolía en la vida, aunque no fue suficiente para alejar a sus demonios. Fueron sus adiciones menos sanas las que acabaron con ella, pues era su propia fortaleza a la vez que su destrucción. Des de luego, si tenemos ocasión es mejor intentar olvidar que aferrarnos a aquello que escuece por mucho que el tiempo lo quiera enterrar.   "Espero que la salida sea alegre, y espero nunca regresar." 

Por último y no menos importante, la imagen que he elegido para encabezar esta entrada es una ilustración de Benjamin Lacombe, a quien os recomiendo encarecidamente echar un vistazo si es que aún no lo conocéis. Puede que el estilo os suene, sus obras han sido portada de varios libros (Cuentos macabros, La mecánica del corazón, Ondina... ). Tenéis un enlace a su página web AQUÍ.