¡Cuervos días!
"Una deslazada y ondulosa cabellera de mujer ha sido, secularmente, un elemento de enorme admiración y, asimismo, de capacidad turbadora en los mitos eróticos de la sociedad masculina, un agente fetichista incitador de secretas fantasías en su imaginación, que se manifiestan tanto en la literatura como en el arte. Sin embargo, aquella "corona real de la femineidad", como la calificó Paracelso, ha encontrado condenas y restricciones morales y religiosas en muchos periodos de la historia. A pesar de ello, el pelo, su adorno, cuidados y belleza, ha inspirado a multitud de poetas, literatos y pintores, como recogen las páginas de este libro. Desde Ovidio al caballero Brantôme, hasta los modernistas, su glosa ha sido una constante en los campos de la sensibilidad artística."
El aire jugaba con sus rubias trenzas para mostrar al cielo soles en la tierra. — Quevedo
Hola! No conocía el libro pero aunque parece interesante no sé si es una lectura muy de mi estilo así que no sé si me animaré con él. Muchas gracias por tu reseña.
ResponderEliminarUn saludo!
¡Holaaaa!
ResponderEliminarPues nunca me había parado a pensar en este tema pero jo, me has dejado pensando y me ha parecido super interesante el libro.
Sin duda me lo llevo apuntado para el futuro.
¡muchos besos!
Hola. Pues es muy interesante. Afortunadamente en nuestra cultura, una puede hacer lo que le dé la gana con su pelo. Pero como cualquier otra parte del cuerpo, tiene su poder, forma parte de nosotros.
ResponderEliminarBesos
Hola Meg, qué libro tan interesante nos traes. Este y el anterior de la autora me pican mucho cuando leo tus reseñas pero luego me entra pereza lectora... a ver si me adentro en alguno de ellos.
ResponderEliminarUn besazo
Mmm, creo que ahora no me apetece. Se ve un libro bellísimo pero no es mi momento.
ResponderEliminarBEsos.